La exactriz francesa Brigitte Bardot , que el año pasado vertió diversos comentarios antiislámicos en su polémico libro Un cri dans le silence, se reunió ayer con el gran mufti de París, Djelloul Bouzidi, y otros líderes musulmanes. El antiguo sex symbol del cine francés intentó convencerles de que frenen el tradicional sacrificio ritual de corderos que se practica cada año en Francia con motivo del festival religioso Ail-el-Kabir.