Las nuevas ‘tops’ no tienen medidas perfectas ni un rostro terso y lozano. Ahora lo que se lleva son las modelos de edad avanzada, de pelo cano y belleza serena. De hecho, la mítica agencia Ford de Nueva York cuenta actualmente con más de 60 mujeres mayores de 50 años que protagonizan sonadas campañas de publicidad.

Tras el éxito de las supermodelos, se impuso el ‘look’ adolescente abanderado por la incombustible Kate Moss. Más tarde un batallón de maniquís estadounidenses de aspecto saludable y de modelos rusas con cuerpos imponentes dieron paso de nuevo al estilo aniñado. Pero actualmente triunfan las modelos de 50, 60 y hasta 80 años. Sin duda, un alegato a favor de la veteranía por encima de los estereotipos.

Ya se trate de una moda con fecha de caducidad o de un cambio real de tendencia, cada vez más agencias ofrecen este prototipo porque así lo demanda su clientela. La última en sucumbir ha sido We Are Knitters (WAK), la firma que ha vuelto a poner de moda entre los jóvenes una actividad tan relajante como hacer punto. Su musa es Mar Zaldívar, de 60 años, una exmaniquí que ha retomado su antiguo trabajo y que posa entre flases y focos con la soltura que da la experiencia. Ya se le conoce como “la modelo de la arruga es bella”, el eslogan que en la década de los 80 hizo famoso al gallego Adolfo Domínguez y que ahora ha rescatado esta casa.

Pero Zaldívar no es la única modelo ‘no tan joven’ que llama la atención. Jacky O’Shaughnessy, de 62 años, es la protagonista de la nueva campaña de la polémica firma America Apparel. En las imágenes, posa serena con su larga melena canosa suelta y sus labios rosados, sentada en el suelo con un conjunto de encaje de 'bandeau' y bragas de color malva.

The Row, la marca de Mary-Kate y Ashley Olsen, que se caracteriza por ser de lo más transgresora y muy imitable, también se ha subido al carro con Linda Rodin, una exmodelo de 65 años y actualmente editora de la revista Harper’s Bazar. “Saben exactamente lo que quieren”, declaró recientemente Rodin a la edición americana de la revista ‘Elle’ refiriéndose a las hermanas Olsen. “Estaría mintiendo si dijera me encantan todas mis arrugas, pero la confianza que me dieron fue realmente crucial”, añadió la exmodelo, que posa con Ursula Wallis y Esther de Jong, conocidas también por su belleza madura.

La casa francesa Lanvin ha sorprendido igualmente con su elección, pues lejos de dar vida a su colección con consagradas ‘tops’ ha optado por mujeres mayores. Una de ellas es la octogenaria Jacquie Murdock, que a partir de su aparición como imagen de la firma se ha convertido en todo una estrella mediática.