Nueve detenidos, entre ellos un policía local y el líder millonario de una organización que se dedicaba al tráfico de armas y la extorsión, y la intervención de cuatro coches de alta gama es el resultado de una operación policial con base en Ibiza que comenzó en 2012.

El operativo ha incluido registros en viviendas de Ibiza y empresas de Alemania y Suiza, países que junto a Bélgica, Francia y Reino Unido, en los que la organización había creado un entramado empresarial y utilizaba como paraísos fiscales para cometer fraudes y llevar a cabo la supuesta venta de armamento. La organización estaba liderada, según la Policía Nacional, por un multimillonario y exmilitar polaco, que se acreditaba como diplomático con un pasaporte de Guinea Bissau sin validez.

La actividad delictiva consistía en hacer extorsiones y cobros de deudas a empresarios en España, a quienes amenazaba con el apoyo de un holandés, miembro de otra organización criminal.