La Guardia Civil ha desarticulado una organización dedicada al blanqueo de capitales procedentes del narcotráfico mediante el uso de criptomonedas en una operación que se ha saldado con 11 personas detenidas y otras 137 investigadas. La red operaba desde España y Colombia y se estima que ha podido blanquear más de ocho millones de euros mediante métodos tradicionales y de compraventa de bitcoins.

Se trata de la operación 'Tulipán Blanca', coordinada por Europol, que se inició gracias a la colaboración mantenida por la Guardia Civil con el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos.

Como resultado de esta operación, se han llevado a cabo un total de ocho entradas y registros en nuestro país, en los que se ha intervenido abundante material informático, documentación y otros efectos indiciarios de la comisión de este tipo de delitos, entre ellos una gran cantidad de bolsas de embalaje de dinero y máquinas contadoras.

Se ha podido demostrar la bancarización de dinero procedente del narcotráfico por valor de 8.369.867 euros en efectivo, mediante el uso de 174 cuentas corrientes abiertas con la única finalidad de crear una gran estructura de blanqueo de capitales. Dentro de las múltiples metodologías de blanqueo detectadas por parte de los investigadores destacan principalmente el uso de tarjetas de crédito y la compra venta de criptomoneda.

Tarjetas de crédito

Respecto al uso de tarjetas, la parte de la organización criminal asentada en España dedicada a la venta de sustancias estupefacientes, aportaba grandes cantidades de dinero en efectivo al grupo de blanqueadores, quienes disponían de la infraestructura para llevar a cabo la denominada 'bancarización' de dicho dinero.

Este blanqueo de capital se producía mediante el ingreso del dinero en efectivo en pequeñas cantidades en diferentes cajeros automáticos de España, para lo que contaban con una amplia red de testaferros.

De manera paralela, miembros de la organización criminal se desplazaban a Colombia con las tarjetas de crédito asociadas a las cuentas corrientes de ingreso, desde donde se realizaban retiradas de efectivo de cajeros automáticos en varias ciudades colombianas como Cali, Bogotá, Medellín y Cucuta, así como en la ciudad de Panamá.

Compra venta de criptomoneda

Debido a la presión de las entidades bancarias y al rastro que deja este tipo de transacciones, la organización optó por intentar romper este seguimiento de sus movimientos de capitales con la compra de criptomonedas, principalmente bitcoins, en una conocida plataforma de venta de moneda virtual.

Pese a la dificultad de investigar este tipo de movimientos, la Guardia Civil ha podido reconstruir íntegramente toda la trazabilidad del capital gracias a la colaboración judicial con las autoridades de Finlandia, país de la sede social de la citada casa de cambio, hasta poder determinar el origen y destino del dinero.

De esta manera se pudo constatar que todas las partidas de dinero convertidas en bitcoins procedían de España, concretamente de la organización investigada, y que el destino de las mismas después de las correspondientes operaciones pantalla de compraventa fueron cuentas corrientes de entidades colombianas, donde se procedía a la retirada de efectivo en Pesos colombianos.

La investigación ha sido pionera en nuestro país, al haber quedado demostrado el movimiento internacional de efectivo de una organización criminal dedicada al blanqueo de capitales mediante el uso combinado de sistemas de bancarización y movimientos de fondos tradicionales con el de nuevos sistemas como es el mundo virtual de las criptomonedas desde su origen hasta el destino final del dinero en efectivo.