EL SENADO DE CALIFORNIA aprobó ayer una ley que impedirá a los prestadores de servicios de internet crear bases de datos para fines comerciales o vender estos datos a terceros. La iniciativa, promovida por una senadora demócrata, se dirige contra el anuncio de Google de explotar un servicio de correo electrónico, Gmail, que rastrea el contenido de los mensajes para insertar publicidad relacionada.