El Ayuntamiento de Madrid no está dispuesto a que el autobús fletado por la organización ultracatólica Hazteoir que transmite mensajes contra los niños transexuales. El equipo de Manuela Carmena ha anunciado que tratará de inmovilizarlo al considerar que, además de ser una campaña "violenta y ofensiva", incumple las ordenanzas municipales y podría además suponer "incitación al odio". Si no lo logra, le espera idéntica medicina en Barcelona, donde la concejala de Feminismos y LGTBI, Laura Pérez, ha amenazado, además con multas de hasta 3.000 euros.

“Los niños tienen pene. Las niñas tienen vulva. Que no te engañen. Si naces hombre, eres hombre. Si eres mujer, seguirás siéndolo”. Antes de que los ayuntamientos salieran a la palestra la iniciativa ya había provocado la indignación de muchos ciudadanos, una campaña de recogidas de firmas en su contra a través de Change.org (ha conseguido 86.000 hasta el momento) y la reacción de los partidos políticos. Tanto el PP como el PSOE han Pedido que la fiscalía actúe.

En el momento que el autobús llegue a Barcelona --previsiblemente el viernes-- el consistorio "no se quedará de brazos cruzados" y aprovechará todo el margen que tiene para sancionar su actividad a través de la Guardia Urbana, si bien debe estudiar si podrá emprender actuaciones como requisar el vehículo.

"Si llega a Barcelona tendremos que esperar a que haga su actividad para detenerlo y proceder a las sanciones vía ley y ordenanza, por tanto, no podrá circular por la ciudad", ha remarcado Pérez, que espera que la ruta se paralice antes de que llegue a la capital catalana.

La concejal también ha dicho que se ha puesto en contacto con el departamento de Igualdad de la Conselleria de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias de la Generalitat, que llevará el caso a la Fiscalía de Delitos de Odio, para poder multar la entrada del autobús, y ha celebrado que exista "suficiente consenso social" entre entidades y ayuntamientos.