La Administración Nacional de Alimentos y Medicinas de China autorizó ayer la comercialización de un test capaz de detectar si un paciente se ha contagiado entre 1 y 10 días antes del síndrome respiratorio agudo grave (SARS, por sus siglas en inglés) y así poder hacer frente a un rebrote del mal. La prueba, que identifica la presencia del antígeno del virus en la sangre, es "barata, de fácil manejo, sensible y segura", según el portavoz del organismo, Yi Hongzhang.

Actualmente hay en China otros dos métodos que detectan el anticuerpo y el ácido nucleico, pero se venden a precios muy elevados. Pero hasta ahora se tardan varias semanas en confirmación a los pacientes sospechosos que están afectados de neumonía atípica viral. China también trata de desarrollar una vacuna contra la enfermedad.