Francia El viaducto de Millau, que acorta distancias entre el norte y el sur de Europa, fue inaugurado ayer con gran pompa por el presidente francés, Jacques Chirac. Tras recorrer los casi 2,5 kilómetros del que se considera como el puente más alto del mundo (foto), Chirac se declaró impresionado por este nuevo "emblema de una Francia moderna y conquistadora". Diseñado por el arquitecto británico Norman Foster, el viaducto tiene 343 metros en su parte más alta, 2.460 metros de largo y 32 metros de ancho. Es la porción que le faltaba a la A-75 para unir París y el Mediterráneo.