Un grupo internacional de científicos, con la participación de la National Oceanic and Atmospheric Administration (NOAA) de Estados Unidos, ha localizado en aguas de la Antártida lo que se considera una nueva especie de orca, también conocida como ballena asesina.

El extraño descubrimiento se produjo el mes de enero pasado, durante una expedición en alta mar desde el cabo de Hornos, en el extremo sur de Chile. Los investigadores obtuvieron una pequeña cantidad de tejido y grasa que les permitirá determinar si las apodadas como ballenas asesinas Tipo D son una nueva especie, tal y como su apariencia muestra, ya que tienen un color diferente y la cabeza más redondeada.

Los investigadores están ahora esperando la confirmación del laboratorio de que las muestras genéticas que recolectaron demuestren que este es un hallazgo raro y resolver un misterio que se ha prolongado durante décadas, según informa la NOAA, ya que desde 1955 se viene hablando de la existencia de las orcas del Tipo D, pero no se ha podido constatar con toda la firmeza. De confirmarse el dato, esta nueva especie de ballena asesina «podría convertirse en el ser vivo no descrito más grande que queda en el planeta y una clara indicación de lo poco que sabemos acerca de la vida en nuestros océanos», dijo Bob Pitman, investigador de la NOAA.