Cinco inmigrantes, entre ellos un bebé, murieron ayer ahogados en las costas de Tarifa (Cádiz) tras naufragar la patera en la que viajaban, con otras 30 personas, cuando estaban a punto de llegar a tierra a primera hora de la mañana de ayer. Efectivos de Salvamento Marítimo continuaban durante la tarde de ayer intentando localizar los cuerpos del resto de pasajeros de la embarcación, ya que hasta el momento sólo dos han sido rescatados con vida cuando trataban de salir del agua.

Los cadáveres hallados corresponden a una mujer subsahariana, el bebé que llevaba en brazos --de entre siete y nueve meses y que al principio se pensó que podría haber salvado la vida-- y otros tres varones mayores de edad y de origen magrebí. Los dos supervivientes han relatado a la Guardia Civil que el naufragio se produjo sobre las seis de la mañana en la zona conocida como Paloma Baja, una prolongación rocosa cercana a la playa de Punta Paloma.

DESESTABILIZACION Del relato de los supervivientes se desprende que, después de advertir la presencia de Salvamento Marítimo, parte de los ocupantes --unas 35 personas, la mayoría de procedencia marroquí y el resto subsaharianos-- se pusieron en pie para abordar tierra a nado, desestabilizando la embarcación neumática de siete metros metros de eslora.

El viento de Levante, que en ese momento soplaba a una velocidad de entre 40 y 60 kilómetros por hora (6-7 nudos) contribuyó a volcar la patera. El delegado del Gobierno en Andalucía, José Antonio Viera, señaló que fueron precisamente las adversas condiciones climatológicas las que impidieron que la embarcación pudiera ser detectada por el Sistema Integral de Vigilancia Exterior (SIVE), dada la espesa niebla que había en la zona. El Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEA) de la Guardia Civil, que proseguía las tareas de rescate a la espera de nuevas localizaciones.

Sin embargo, ésta no fue la única embarcación que llegó ayer a las costas andaluzas. Sobre las seis de la mañana, efectivos de Salvamento Marítimo interceptaron una barca con otros 16 inmigrantes de origen marroquí (todos ellos eran varones y mayores de edad) frente a la playa conocida como Valleniza, en el municipio de Vélez Málaga. En Cádiz, fueron interceptados y detenidos otros cinco.

Poco más tarde, a las 10 horas, una patrullera de la Armada Francesa avistaba una nueva embarcación a 30 millas de las costas de Castel de Ferro (Granada), en la que viajaban 33 marroquíes. La totalidad de los 54 ocupantes que viajaban en ambas embarcaciones serán devueltos a su país de origen a lo largo de la jornada de hoy.