La ciudad de Nueva York rendirá tributo a las activistas transgénero Marsha P. Johnson y Sylvia Rivera, que jugaron un destacado papel en los disturbios del 29 de junio de 1969 en el bar Stonewall de Nueva York, que espolearon el movimiento por los derechos de la comunidad homosexual en los EEUU.

De acuerdo con una nota del Ayuntamiento, será la primera obra de arte pública permanente que reconocerá a mujeres transgénero en el mundo y será colocada en el popular barrio Greenwich, en el distrito de Manhattan.

El monumento estará en el Ruth Wittenberg Triangle, un espacio público en el corazón del vecindario, donde hay varios emblemáticos puntos de referencia que fueron fundamentales para la historia y la lucha de la comunidad LGBTQ, incluyendo el Stonewall, indicó el Ayuntamiento en un comunicado, pero el lugar donde finalmente estará ubicado el monumento será discutido en reuniones comunitarias.

Protegen a la comunidad LGBTQ

"Las comunidades transgénero y no binario están resintiendo de violentos y discriminatorios ataques a través del país", dijo el alcalde Bill de Blasio en el comunicado en el que informó sobre el homenaje a Rivera (1951-2002) y a Johnson (1945-1992), al cumplirse cinco décadas de los disturbios del Stonewall y el Mes del Orgullo Gay.

"En Nueva York, estamos enviando un claro mensaje: te vemos por quien eres, te celebramos y te protegeremos. Este monumento honrará el papel pionero en la lucha por los derechos humanos en nuestra ciudad y a través del mundo", afirmó. Destacó que la ciudad recibirá unos cuatro millones de visitantes para el 50 aniversario del Stonewall, el 30 de junio durante la Marcha del Orgullo Gay.

El comienzo de la lucha

El Stonewall era un bar gay administrado por la mafia y situado en Greenwich, donde la noche del 28 de junio de 1969 estallaron unos disturbios entre los clientes y la policía, cuando agentes llevaban a cabo una redada. Las protestas que se extendieron varias noches constituyeron un punto de inflexión en Estados Unidos en la lucha por los derechos civiles del movimiento LGBT.

"Estoy feliz de que la ciudad demuestre una vez más por qué es la mejor ciudad en el mundo honrando la historia de toda su gente y liderando el camino hacia la unidad y el entendimiento", indicó por su parte Al Michaels, sobrino de Johnson.