El Tribunal Constitucional (TC) ha obligado al Centro Nacional de Inteligencia (CNI) a readmitir a una funcionaria a quien consideró no idónea y despidió a partir de varios informes que clasificó como secretos, algo que el tribunal no acepta.

En una resolución conocida este viernes, el TC ampara a la funcionaria, que argumenta en su favor que fue discriminada laboralmente por estar embarazada.

El Constitucional anula el despido y le dice al CNI que podía haber explicado las razones del cese sin revelar información que pusiera en peligro la seguridad nacional. Lo contrario, dice el TC, supondría "un espacio de impunidad al control jurisdiccional", es decir, que con el argumento del secreto el CNI estaría en condiciones de tomar decisiones arbitrarias sin deber argumentarlas ante los tribunales cuando los afectados reclamen tutela a sus derechos.

La demandante ingresó en el CNI como personal estatutario temporal en 2004 por lo que, según establece el Estatuto del Personal del Centro Nacional de Inteligencia, transcurrido un periodo de seis años el Centro debía ofrecerle su integración definitiva o cesarla antes de finalizar el sexto año por no ser idónea.

Según los datos aportados al procedimiento por la recurrente, durante los años en que prestó servicios las valoraciones del CNI sobre su trabajo fueron siempre satisfactorias, pero en septiembre de 2010, cuando estaba embarazada de cinco meses, fue cesada.

La Administración argumentó la existencia de dos informes, de 16 de diciembre de 2009 y de 15 de julio de 2010, de la Dirección de Apoyo a la Inteligencia "que contenían aspectos desfavorables" al desempeño de las funciones por la recurrente. Pero el centro debió buscar el modo de desvelar los argumentos que contenían sin que se viera afectada la seguridad nacional, le dice el TC.