es el porcentaje de alumnos españoles que se muestran convencidos de que irán a la universidad. La tasa más alta de toda España, por comunidades, es la de Cataluña, que asciende hasta el 57,4%.

La importancia de una buena motivación y las expectativas de futuro las mide la encuesta sobre el bienestar de los estudiantes con preguntas como las siguientes: ¿Quieres siempre sacar las mejores notas en todas tus asignaturas? o ¿Aspiras a ser siempre el mejor, hagas lo que hagas?

La media española en este capítulo alcanza el 61%, lejos de las cifras de, por ejemplo, el 93% que se da en Estados Unidos o el 90% que se observa en el Reino Unido y también en Israel, entre otros. Un dato el de España por debajo incluso de Singapur, con un 68,4%.

Una curiosidad. Pese a que las chicas dicen ser mucho más exigentes consigo mismas en las tareas y resultados escolares que los chicos, estos últimos admiten ser más competitivos y ambiciosos en otras actividades de su día a día, fuera del ámbito estrictamente escolar.

Pero atención: los estudiantes que quieren ser los mejores de su clase o los que luchan por obtener calificaciones superiores tienen, según el informe, más probabilidades de caer en situaciones de estrés y ansiedad ante los exámenes, incluso si están bien preparados.