Un despiste fruto de la somnolencia está detrás del atropello sufrido este jueves por un anciano y su cuidadora en Sevilla. Ambos acababan de bajarse de una furgoneta cuando volvían del centro de atención diurna y fueron embestidos por un conductor de VTC (Vehículo de Transporte con Conductor) que, según reconoció poco después, había dado una cabezada al volante porque llevaba muchas horas trabajando.

Fuentes del Servicio de Emergencias de Sevilla explicaron que el accidente se produjo en torno a las 18.00 horas en la calle Evangelista, cuando recibieron los primeros avisos de un atropello múltiple. Al llegar al lugar, los efectivos sanitarios y la Policía Local comprobaron que los heridos eran un anciano de 89 años, y movilidad reducida, y su cuidadora, una mujer de 58 años. Tras una primera atención en la calle, fueron derivados a un centro hospitalario, aunque no revisten heridas de gravedad.

A PASO MUY LENTO

Según el relato de los testigos, ambos heridos viajaban en una furgoneta que les trasladaba desde el centro de día al que acude el anciano. No obstante, y dados los problemas de movilidad del hombre, quisieron cruzar la calle por el mismo lugar en que paró el vehículo, el más cercano al domicilio del anciano, en vez de acudir al paso de peatones situado a una veintena de metros. Fue en ese momento cuando fueron arrollados por un vehículo VTC.

Las primeras hipótesis apuntan a que el conductor del mismo, de 39 años, pudo dormirse unos segundos y no percatarse de la presencia de ambos peatones, que cruzaban a paso muy lento. El hombre fue sometido a las pruebas de alcoholemia y drogas, que dieron resultado negativo. Según confesó a los agentes, llevaba varias horas de trabajo al volante, por lo que sufrió un microsueño. Se despertó con el golpe a los peatones, a los que reconoció no haber visto.