Más de 200 asociaciones de inquilinos de toda España han convocado una huelga de alquileres a partir del próximo 1 de abril "ante el abandono gubernamental de las arrendatarias afectadas por la crisis del coronavirus". Los organizadores explican que han decidido llevar a cabo la acción después de recibir más de 8.000 correos de personas que no podrán pagar el alquiler este mes. Las asociaciones reclaman una suspensión de los alquileres por la gran afectación que está provocando el coronavirus en miles de familias, pequeños comerciantes y autónomos.

Los organizadores exponen que a partir de este 1 de abril "comenzará una cascada de impagos de alquileres masiva que va a desembocar en una nueva crisis de vivienda". "Por ello hemos denunciado y exigido al Gobierno que suspenda el pago de los alquileres para las personas que han visto sus ingresos reducidos o los han perdido a causa de la crisis", sentencian. Las asociaciones advierten de que "todas las rentas inmobiliarias se siguen cobrando a precio de oro, como si la economía no se hubiera paralizado, y aboca a miles de personas a endeudarse para poder pagarlas".

La campaña 'Suspensión de Alquileres Ya' considera que, después de que el Gobierno ignore sus demandas, "la única respuesta posible es convocar una huelga de alquileres de las familias, pequeños comerciantes y autónomos afectados por la crisis del coronavirus. Si no cobramos, no pagamos. Si la economía productiva se para, la economía rentista también". Cabe señalar que, debido al estado de alarma, el Ejecutivo tomó varias medidas económicas para hacer frente a la situación pero no en este sentido.

Los convocantes también animan a sumarse a la huelga a aquellas personas que están viendo "como sus ingresos caen o entran en una situación de precariedad". Y avisan: "La huelga de alquileres durará tanto tiempo como sea necesario hasta que el Gobierno suspenda el pago para las personas afectadas por la crisis del coronavirus".

Así, exponen que no todo el peso económico debe recaer sobre el Estado ni sobre los pequeños arrendadores, sino que consideran que las entidades financieras y los grandes arrendadores también tienen que colaborar ante esta situación". Los organizadores también han abierto una caja de resistencia para "dotar a las personas que se sumen a la huelga de una mayor cobertura colectiva".