La infanta Cristina y su marido, Iñaki Urdangarín, aprovecharon ayer el sol del último domingo del otoño para dar un paseo por el barrio Gótico de Barcelona junto con sus tres hijos. El embarazo de la duquesa de Palma, que será madre por cuarta vez el próximo verano, ya resulta más que evidente. Los duques de Palma se mezclaron con el gentío en las calles mientras sus hijos comían patatas.