En pleno siglo XXI, más de 1.000 millones de personas beben aguas insalubres, mientras que 2.600 millones de seres humanos --un 40% de la humanidad-- carecen de servicios sanitarios adecuados y de acceso a una higiene básica. De ellos, 1.500 millones habitan en las zonas más deprimidas de la India y China. Un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Unicef advierte de que la situación no ha mejorado desde el año 2000 y de que tres millones de personas fallecen anualmente por enfermedades relacionadas con el agua.