La Guardia Civil detuvo ayer a un hombre de 38 años acusado de un delito de abandono de persona incapacitada después de que consintiera que su hermano, de 35 años y con una discapacidad reconocida del 97%, muriera desnutrido el pasado mes de febrero. El detenido era el tutor legal del fallecido tras la muerte de sus padres, y ambos convivían en un cortijo de Órgiva (Granada) hasta que el discapacitado murió por desnutrición, según la autopsia, informó este viernes la Guardia Civil en un comunicado.

Tras su muerte, el ahora arrestado no avisó a nadie y decidió enterrar a su hermano en el monte, en unos terrenos junto a la finca, para, según sospechan los investigadores, poder seguir cobrando la pensión que recibía por cuidar de él. Una vez que lo enterró abandonó el domicilio familiar, según la Guardia Civil, que recibió el pasado 28 de febrero un requerimiento de un juzgado de Órgiva por la supuesta desaparición de esta persona incapacitada que estaba bajo la tutela de su hermano, para que fuera localizada.

La Guardia Civil comprobó que no solo él había desaparecido, sino también el hermano que lo tutelaba y que ha sido finalmente localizado en un hostal de Motril (Granada). El hombre acabó confesando el crimen.