"Tenemos que sacar del armario la cuestión del crecimiento de la población. Todos tenemos que ser responsables en nuestra vida y tomar decisiones éticas. Cada persona puede marcar diferencias cada día". La reputada naturalista Jane Goodall irrumpió en la cumbre del clima de la ONU hace tres años con poderosas palabras y voz suave. Goodall, famosa por su trabajo con chimpancés, relacionó el cambio climático con la pérdida de las selvas y con la tala para lograr alimentos para una población mundial cada vez mayor. "Los bosques y los océanos no dan de sí para satisfacer a 7.000 millones de personas", la secundó el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.