Un joven de 17 años fue detenido el lunes pasado como acusado de haber abusado sexualmente de tres menores de edad en la Pobla de Mafumet, en Tarragona. Las tres agresiones por las que le detuvieron los Mossos habrían sucedido entre finales de mayo y mediados de junio y las víctimas habrían sido niños de 10 años.

La Fiscalía investiga los hechos y al detenido se le ha impuesto, como medidas cautelares, una orden de alejamiento de 150 metros de las tres víctimas -a las que conocía y confiaban en él- y a seguir un tratamiento terapéutico.

Los hechos se supieron cuando los niños explicaron lo sucedido a sus padres y el pasado lunes, han confirmado los Mossos d'Esquadra, detuvieron al adolescente.

En la vistilla celebrada el martes en el Juzgado de Menores, el fiscal solicitó el internamiento en régimen cerrado con un tope de seis meses y una orden de alejamiento y comunicación, según avanza hoy el 'Diari de Tarragona'.

La abogada del detenido se opuso a la medida, porque no había habido exploración de las víctimas y entender que no existían pruebas concluyentes, aunque el equipo técnico lo evaluó como de elevado riesgo por problemas de maduración y de trastorno ansioso.

Este equipo aconsejó internamiento en régimen semiabierto, pero a pesar de los indicios, el juez decidió esperar "nuevos indicios y del resultado de las diligencias de investigación que se lleven a cabo durante la instrucción".

El juez tiene en cuenta que el entorno familiar del adolescente es adecuado, que es deportista, buen estudiante, y no se aprecia riesgo de reiteración ni de fuga.

Los hechos han provocado tensión en plena fiesta mayor del municipio y algunos de los padres de las víctimas tuvieron que ser atendidos por ataques de ansiedad.

Los indicios señalan que las víctimas habrían sido obligadas a practicar felaciones y habrían sufrido penetración anal.