La Guardia Civil detuvo ayer en Navia a un hombre como presunto autor de la muerte de la mujer cuyo cadáver apareció el martes 6 de marzo en el embalse de Arbón, en Asturias. El cuerpo de María Paz Fernández Borrego, gijonesa de 43 años, presentaba múltiples contusiones y un golpe en la cabeza y, aparentemente, había sido lastrado.

El detenido es J. L. O., un conocido de la fallecida que estos días ha concedido entrevistas a medios asturianos para asegurar que, pese a que el día de su desaparición estuvo con ella, no tuvo nada que ver con la muerte.

El hombre conservaba conversaciones de wasap en las que, según afirmaba, la mujer se mostraba angustiada y preocupada. Además, aseguró que aquel día la había invitado a cenar a su casa, pero que no acudió. El cuerpo de la víctima fue encontrado flotando sobre las 15.50 horas del martes en una zona de difícil acceso en una orilla del embalse, en las proximidades de un cámping. La mujer había reservado un hostal en Navia, adonde iba con cierta frecuencia, pero no llegó a dormir en el establecimiento.

Al día siguiente, fue encontrado su vehículo junto al hospital de Jarrio, en el vecino municipio de Coaña, a unos catorce kilómetros del embalse donde fue hallado su cadáver, así como su perro suelto por las calles de Navia.

Tras su rescate por el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil, el cuerpo pudo ser identificado por el cabello, la ropa y el tatuaje que tenía grabado en un hombro. La autopsia reveló múltiples contusiones. Continúan las labores de búsqueda de otras dos mujeres desaparecidas en Asturias en los últimos días, pero al parecer los casos no guardan relación.