Los científicos españoles no fueron unánimes al enjuiciar la investigación coreana. Las discrepancias, sin embargo, fueron de orden ético y centradas en el hecho de haber usado células embrionarias.

La ministra de Sanidad, Ana Pastor, dijo ser contraria a la investigación "con seres humanos" y reiteró que está "en línea con la declaración del Consejo de Oviedo", que rechazó la clonación con fines reproductivos.

Montse Boada, coordinadora del programa de fecundación in vitro en el USP Instituto Dexeus, de Barcelona, defendió la línea de trabajo de Corea del Sur en la que se han usado embriones humanos madurados de forma artificial. Boada cree "importante" trabajar en esa línea, pero sin dejar la investigación con células madre adultas. Marcelo Palacios, presidente de la Sociedad Internacional de Bioética afirmó: "Hay que apoyar cualquier método de obtención de células madre". Bernat Soria, coordinador del programa de investigación sobre células madre de la Junta de Andalucía, calificó de "excelente noticia" el hallazgo. "Ahora lo importante es hacerlo en España".

No lo vio así el catedrático de Genética Juan Ramón Lacadena, de la Complutense de Madrid, que cree que es "un paso más hacia la clonación irresponsable".