La pesadilla parece haber terminado para Dolores Vázquez. Después de ser condenada por un jurado y pasar 17 meses en la cárcel, la justicia ha decidido que no fue la culpable del asesinato de la joven de Mijas (Málaga) Rocío Wanninkhof, en 1999. La titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Fuengirola dictó ayer el sobreseimiento de la causa contra Vázquez y consideró único acusado a Tony Alexander King.

El británico estará en prisión provisional sin fianza, mientras que el expediente contra su amigo y tercer imputado, Robert Graham, ha sido archivado de forma provisional, pese a haber "indicios que apuntan a su participación como encubridor".

La decisión ya ha sido objeto de recurso por parte de la acusación particular, que mantuvo la imputación de Vázquez y sumó posteriormente la de los otros dos acusados, y por la defensa del acusado, que considera que las pruebas "sólo demuestran que King estuvo en el lugar de los hechos, no que fuera el autor".

La juez María Jesús del Río se ha basado en la primera declaración de King ante la policía, tras su detención, en septiembre del 2003, en la que se autoinculpó de las muertes de Rocío Wanninkhof y Sonia Carabantes. También ha considerado la colilla con el ADN del británico hallada en el lugar del homicidio y las declaraciones de los testigos, entre ellos su exmujer, Cecilia, y Graham.

SIN INDICIO ALGUNO El auto judicial indica que "no se pudo hallar indicio alguno de que Vázquez conociera a los otros imputados". La juez expone que "cuando se dictó la sentencia condenatoria anterior, posteriormente anulada, no se conocía la existencia de los delitos que implican a King", y que tras la nueva valoración de los indicios que apuntaban a la participación de Vázquez en el suceso "ninguno la conecta directamente con los hechos".

Al saberse la noticia, fuentes cercanas a Dolores Vázquez aseguraron que "está feliz porque siempre había confiado en la justicia". Por su parte, la familia de Rocío mostró su desconcierto. La tía de la joven, Josefina Hornos, manifestó: "Ahora no sabemos a quién creer, si a los otros jueces o a éstos. Esto es un cachondeo".

Hornos explicó: "La familia está muy mal, porque, cinco años después, aún no sabemos quién mató a mi sobrina". "King miente desde el principio. Dice --agregó-- que la apuñaló en el estómago, pero mi sobrina murió con cuchilladas en el cuello y la espalda".

Respecto a la exculpación de Dolores Vázquez, Hornos reiteró: "Nosotros no la acusamos a ella directamente. Fue la justicia, y nosotros lo creímos, pero ahora nos dice que no es ella". De todas formas, aseguró que "34 indicios y 17 pruebas --en referencia a los argumentos que condenaron a Vázquez-- son muchos, y la duda sobre su implicación no hay quien nos la quite".