Manuel Blanco, Julio Latorre y José Enrique Rodríguez, los tres bomberos de la ONG Proem-Aid, han llegado esta mañana al tribunal de Mitilene, capital de la isla de Lesbos, donde se va a celebrar el juicio al que se enfrentan por presunta tentativa de tráfico de personas. Acompañados por el presidente de la oenegé, Onio Reina, varios familiares y una nutrida delegación institucional, los tres han entrado a la sala donde intentarán demostrar que su única intención en la isla fue realizar labores de rescate humanitario.

"Este no es mi sitio natural ni habitual. No visitamos nunca juzgados a no ser que sea para un informe o algo relacionado con temas de bomberos y, bueno, esperanzados con que todo acabe satisfactoriamente hoy tanto para nosotros como para el otro equipo", ha dicho Manuel Blanco a su llegada al tribunal.

En Grecia el delito del que se les acusa está castigado con hasta 10 años de cárcel por cada persona introducida en el país de forma ilegal. "Los focos están puestos hoy sobre nosotros pero el verdadero problema es que sigue ahogándose gente en el mar", ha recordado Blanco.

En Lesbos hoy se encuentra una nutrida delegación institucional que ha venido para mostrarles su apoyo durante este proceso. "Son funcionarios públicos que trabajan siempre en el marco de la legalidad, que siempre tienden la mano a quienes más lo necesitan y que vinieron a Grecia en ayuda humanitaria a salvar vidas y por eso de este día esperamos lo mejor", ha afirmado la consejera de Justicia de la Junta de Andalucía, Rosa Aguilar.

"La acción humanitaria nunca debería ser penada, nunca debería ser condenada, sino al contrario, debería ponerse en valor", ha señalado Verónica Pérez, presente en Grecia en representación del Partido Socialista.

BOTE A LA DERIVA

Por su parte, desde el Ayuntamiento de Sevilla, donde residen los tres bomberos, la concejala Cristina Morata, ha manifestestado su deseo de que se imponga "el sentido común" y se ponga fin al "calvario" que han sufrido durante dos años.

Junto a ellos comparecen, con una línea de defensa separada, Mo Abassi y Salam Aldeem, los dos daneses que tripulaban la embarcación cuando fueron detenidos por los guardacostas griegos.

La noche del 14 de enero de 2016 los tres sevillanos acudieron a la llamada de otra oenegé, la danesa Team Humanity, que les pidió su colaboración para rescatar un bote a la deriva. Ya que la embarcación de Proem-Aid estaba siendo reparada decidieron salir con ellos, pero al llegar al lugar donde supuestamente debía encontrarse el bote con refugiados no encontraron a nadie, por lo que regresaron a puerto, donde fueron detenidos.

Después de tres días encerrados juntos en una celda salieron bajo fianza y regresaron a sus países.