EL HOMBRE se entregó voluntariamente a la Guardia Civil de Pontevedra y confesó ser el autor de la muerte de la joven Sara Alonso, cuyo cadáver apareció el sábado en una finca del barrio vigués de Canido. Según fuentes de la subdelegación del Gobierno, el caso no se puede dar por cerrado, ya que es necesario "ser prudentes" y comprobar lo que dice el detenido antes de tomar una decisión al respecto.