España es el estado de la UE que más inmigración recibe cada año, según los datos publicados ayer por Eurostat, organismo de estadísticas comunitarias. España absorbió 594.300 inmigrantes netos en el 2003.

Italia le sigue de cerca, con 511.200 inmigrantes, mientras que Alemania y Gran Bretaña, los otros dos países con un número significativo de inmigrantes, se sitúan a gran distancia, con 114.900 y 103.000 foráneos, respectivamente. La inmigración en España e Italia representa aproximadamente los dos tercios de la inmigración total de la UE ampliada de 25 estados miembros.

La inmigración aportó el 92% del incremento demográfico registrado en España durante el año pasado, que elevó la población del país a 42,198 millones de personas a fecha 1 de enero de este año. Esto representó un crecimiento del 1,55% de la población durante el año pasado.

INCREMENTO DEL 0,4% El crecimiento de la población española se limitó a 53.000 personas. A pesar de que la tasa de natalidad registró en el 2003 una ligera mejora, al pasar del 1,01% al 1,04%, la tasa de fecundidad se limitó a 1,29 hijos por cada mujer. Lejos queda el 2,2 de 1980.

La población de la UE de 25 estados miembros se incrementó durante el año pasado un 0,4%, hasta situarse en 456,4 millones de personas. Ese aumento se debió fundamentalmente, al igual que en España, a la llegada de 1,69 millones de inmigrantes, mientras que el crecimiento natural de la población se limitó a 200.300 personas.

Sin la inmigración, la población habría disminuido en Alemania, la República Checa, Grecia, Italia, Austria, Eslovenia y Eslovaquia. La población disminuyó en Letonia, Lituania, Estonia, Hungría y Polonia.

Un fenómeno creciente en toda la UE es el elevado porcentaje de hijos nacidos fuera del matrimonio, que alcanzó una tasa del 30,2% del total de nacimientos, lo que muestra la intensidad de la crisis de la institución matrimonial en toda Europa.

España, con el 23,2% de los nacimientos en el 2003 fuera del matrimonio, no escapa a esta tendencia generalizada. Los porcentajes más elevados se registraron en Suecia (56% del total), seguida de Dinamarca (44,9%), Francia (44,3%), Letonia (44,2%), Gran Bretaña (43,1%) y Finlandia (40%).

Las tasas más altas de fecundidad correspondieron a Irlanda (1,98 hijos por mujer en edad de procreación), Francia (1,89) y Finlandia (1,76). Las tasas más bajas se produjeron en Chipre (1,16), Eslovaquia (1,17) y la República Checa (1,18).

ESPERANZA DE VIDA España tiene la esperanza de vida más elevada de toda la UE para las mujeres (83,7 años) y la segunda más elevada para los hombres (77,2 años), ligeramente por detrás de los varones suecos (77,9 años). La esperanza de vida en la UE es de 74,8 años para los hombres y 81,1 para las mujeres.