El Ministerio de Sanidad se está preparando ante una posible expansión mundial de la gripe del pollo. Su titular, Ana Pastor, presentó ayer los arcos térmicos que permitirán detectar estados febriles entre los viajeros en los aeropuertos, "por si fuera necesario utilizar esta medida de control" si se demuestra la transmisión del virus entre seres humanos.
Pastor presidió el Comité Nacional para el Control y Seguimiento de la Gripe, que también estudió la actualización de protocolos de actuación que se pusieron en marcha el año pasado para evitar la entrada en España del síndrome respiratorio agudo y grave (SARS, en sus siglas en inglés) o neumonía asiática.
La ministra explicó que su departamento dispone de 14 cámaras tomográficas infrarrojas, que ya podrían ser usadas. El aeropuerto de Barajas sería el primero en ser equipado. En caso necesario, a continuación se extendería el uso de estos aparatos a los aeródromos de Zaragoza, Barcelona, Baleares, Málaga, Sevilla, Tenerife, Bilbao y Las Palmas. Después, se colocarían en el resto.
El nuevo sistema, similar al de EEUU y Canadá, capta las radiaciones que emite el cuerpo humano y le permite medir su temperatura en tiempo real.
VETO EUROPEO Mientras, la Unión Europea aprobó ayer una prórroga de seis meses de la suspensión de importaciones de pollo y productos derivados de este animal procedentes de Tailandia, debido a la epidemia presente en la zona. El veto también alcanza a las aves exóticas.
