Un informe de la Fundación Santa María, Jóvenes 2000 y Religión , basado en más de un millar de entrevistas a jóvenes de entre 13 y 26 años, evidencia el desinterés que la Iglesia suscita en este segmento de la población. Uno de los autores del trabajo presentado ayer, el sociólogo Francisco Carmona, afirmó que el informe refleja que la Iglesia católica va camino de convertirse en España en "una secta en el sentido sociológico o numérico".

El estudio señala, según explicó el también sociólogo Javier Elzo, que únicamente el 5% de la muestra está de acuerdo con "la ortodoxia y la ortropraxis" de la doctrina católica, "sobre todo en el aspecto de la sexualidad".

Carmona agregó que sólo uno de cada tres jóvenes se identifica como católico practicante y uno de cada diez asiste a la misa dominical. En 1960, el 95% se consideraba practicante y un 58% no faltaba nunca a misa. Y un 10% había pensado en el sacerdocio.

Frente a este panorama, la Iglesia "cada vez se ve más acosada y encerrada en sí misma y mantiene unas fronteras muy claras", señaló Carmona.

El director del informe, Juan González Aleo, aseguró que desde finales de la década de los 80 "el mensaje de la Iglesia crece en opacidad" y tiene dificultad para poder llegar a los jóvenes. Por este motivo, asegura el estudio, ha descendido también el número de vocaciones.