Si la semana pasada un actor norteamericano se quitaba la vida en directo a través de Facebook, esta vez ha sido la misma red social la que ha ayudado a impedir que un hombre se suicidara en Pontevedra. Lo cuenta este jueves 'La voz de Galicia', que subraya el trabajo ejemplar de tres guardias civilesy su rapidez a la hora de localizar al vecino del 'concello' de Ponte Caldelas que estaba sufriendo una crisis de ansiedad extrema.

A última hora de este martes, una llamada desde Barcelona al Centro Operativo de Servicios pedía auxilio para su tío, que vivía en ese pueblo gallego. Los agentes no tenían más datos, solo que se trataba de un hombre, de 53 años, con problemas psicológicos y una crisis nerviosa. Por esas señas ningún guardia civil conocía a nadie en el 'concello'. Además, el teléfono de contacto que les facilitó el sobrino correspondía con un domicilio en Tarragona.

RÁPIDA RESPUESTA

Pero los agentes fueron rápidos y pensaron en buscarle en Facebook. '¡Eureka! Los agentes Luis Uxío, Jesús Castellano y Joaquín Pérez comprobaron desde varios terminales que el hombre que se disponía a acabar con su vida mantenía abierto un perfil en la red social. En el muro de este señor encontraron que tenía como "amigo" un negocio en la parroquia de Forzáns. En el local les dieron la dirección de la casa de esta persona. Ya lo tenían.

"Encontramos al señor sentado en el bajo de su casa. La puerta estaba abierta y tenía autolesiones en el cuello, las muñecas... Estaba bastante nervioso. Quería autolesionarse sí o sí", explican al rotativo gallego los agentes, que narran que el hombre se sacó un cuchillo enorme de la manga y suplicaba que le disparasen.

Al final, sin llegar a desenfundar el arma, los tres policías consiguieron que dejara de hacerse daño. El hombre les explicó, entonces, su situación desesperada: vive solo, en una ciudad que no es la suya y sin apenas medios económicos. "No tiene ni para comprar butano", denuncian los protagonistas que han evitado la tragedia.