La Guardia Civil maneja el disparo fortuito como principal hipótesis de la muerte de un niño de 4 años que fue alcanzado ayer durante una cacería que se celebraba en la localidad sevillana de Guillena. El suceso se produjo minutos antes de las 11.30 horas en un coto de caza situado en la finca La Lapa, en la sierra norte de Sevilla.

Al llegar, los médicos trataron de reanimar al niño, que presentaba un único disparo pero no pudieron hacer nada por mantenerlo vivo. La Guardia Civil sigue investigando el accidente.