La justicia francesa investiga la muerte de tres recién nacidos prematuros que estaban recibiendo en el hospital de Chambéry un tratamiento alimentario elaborado por un laboratorio farmacéutico. Los fallecimientos tuvieron lugar a comienzos del mes de diciembre pasado.

Además de los tres bebés fallecidos, un cuarto presentó los mismos síntomas unos días después, pero pudo sobrevivir, explicó el director del hospital, Guy-Pierre Martin, en declaraciones a France Info. Martin señaló que los cuatro bebés habían recibido alimentación por vía parenteral elaborada por un laboratorio farmacéutico cuya identidad no desveló.

La ministra de Sanidad, Marisol Touraine, aseguró ayer que se han retirado todos los lotes del alimento que se administró a los bebés.