La primavera sigue sin arrancar en Madrid. Hace frío y llueve. ¿Qué pasará el día de la boda de Felipe de Borbón y Letizia Ortiz? En los últimos 10 años, esa jornada se ha caracterizado por las temperaturas agradables. Según las estadísticas del Instituto Nacional de Metereología, sólo en 1994, 1998 y 2002 cayeron algunas gotas. Al Príncipe, sin embargo, esas estadísticas no le sirven de mucho. El quiere saber qué ocurrirá de verdad. "Todos los días pregunto qué tiempo va a hacer", dijo ayer el heredero de la Corona a los periodistas después de que le fuera entregada la Medalla de Honor de Madrid.

La capital amaneció ayer con el cielo encapotado. Un poco antes del mediodía comenzaron a caer chuzos de punta. Eso no impidió que cientos de vecinos acudieran a las inmediaciones del ayuntamiento. El motivo: ver durante unos segundos a los novios reales. A las 12.00 en punto, Felipe y Letizia salieron del vehículo oficial. El iba sin paraguas. Ella llevaba uno negro, pero lo tuvo que dejar. Cosas del protocolo.

La pareja fue recibida, además de por el escuadrón de caballería de la policía municipal, por el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón (PP), y su mujer, Mar Utrera. Los caballeros iban de traje oscuro. Ellas estaban más primaverales. Letizia escogió una chaqueta blanca entallada y una falda a la rodilla de color beige. Mientras, la mujer del alcalde optó por una falda de vuelo estampada.

Una vez dentro del salón de plenos, Ruiz-Gallardón impuso la medalla de honor de Madrid al Príncipe en reconocimiento a su contribución a los valores "democráticos, constitucionales y sociales".

Una hora más tarde, cuando la lluvia dejó paso al sol, la comitiva se trasladó a una carpa instalada junto al ayuntamiento. Allí estaban los miembros de la orquesta sinfónica de Madrid. Bajo la batuta de Wolfgang Izquierdo, los músicos interpretaron Música para una boda , una melodía de nueve minutos compuesta por Nacho Cano, que recibió el encargo del alcalde, melómano reconocido. La melodía no sonará el día de autos, pero es el regalo oficial del Ayuntamiento de Madrid. Tras el miniconcierto, la pareja saludó a algunos de los invitados. Entre ellos, el tenor Plácido Domingo, el cantante Miguel Bosé, la actriz Núria Espert y el juez Baltasar Garzón.