EL JOVEN , que había sido secuestrado hace varios días, se encontraba maniatado en una nave industrial de Alcalá de Henares (Madrid). Sus tres captores, detenidos en el asalto de los agentes, habían exigido 1,5 millones de euros a la familia bajo la amenaza de enviarle los dedos de su víctima en una caja de cartón. Las investigaciones comenzaron a finales del pasado mes de julio y se centraron en un grupo de delincuencia organizada.