El Gobierno optó por contraprogramar a Unicef y Cáritas con una medida rueda de prensa de la secretaria de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, Susana Camarero, quien empezó por asegurar que el Ejecutivo "es consciente de la grave situación que viven muchas familias españolas" y "trabaja sin descanso para hacerle frente". Una tarea que, a su juicio, ya empieza a verse en estadísticas que reflejan "un estancamiento" o "cambio de tendencia". "Respetamos los datos que proporcionan Cáritas o Unicef, pero el Gobierno tiene que guiarse por las fuentes oficiales", como el Instituto Nacional de Estadística (INE) o Eurostat, dijo Camarero. Los datos de Camarero no coinciden con los proporcionados por estas instituciones. "La tasa de riesgo de pobreza o exclusión social AROPE se mantiene, aunque se reduce entre mayores de 65 años. Esta tasa, entre 2008 y 2011, creció el 13,1%, llegando al 27,7%, un crecimiento cinco veces superior a otros países de la Unión Europea", afirmó la responsable de Servicios Sociales. Este indicador combina tres conceptos: el riesgo de pobreza, la carencia material y la baja intensidad en el empleo. Según la nota publicada por el INE el pasado mayo, nunca ha llegado al 27,7%. En el 2011 se situó en el 26,7%, un punto menos de lo afirmado. En el 2012, escaló al 27,2% y en el 2013 aún subió una décima más. Camarero habló de "la última encuesta del INE sobre condiciones de vida" que mostraba "un leve retroceso de la tasa de pobreza, del 0,2%", según Camarero. Horas después, Rajoy dijo ayer en el Senado que "España lleva ya creciendo cinco trimestres consecutivos, tras muchos años de crecimiento negativo" y que "se está creando empleo neto".