Las principales cadenas de distribución españolas han comenzado a reclamar a sus proveedores que dejen de usar aceite de palma, y en los casos en que no sea posible sustituirlo, piden utilizar aquel que cuente con certificado de sostenibilidad.

Portavoces de las compañías Mercadona, DIA, Lidl y Auchan confirmaron a la agencia Efe que ya mantienen conversaciones con sus proveedores para eliminar este ingrediente, aunque desde la industria advierten de que no siempre es posible y no existe por el momento una alternativa sin alterar las condiciones del producto. «Los interproveedores y proveedores de Mercadona llevan tiempo realizando movimientos para sustituir, cuando es posible, el aceite de palma y otras grasas trans en sus productos y van a continuar avanzando en esta línea», apuntaron fuentes de la empresa, líder del sector de la distribución con cerca de un 23% de cuota del mercado.

Desde DIA subrayaron que su política pasa también por «sustituir siempre que sea posible tecnológicamente» este ingrediente, y cuando no es viable reclaman que se utilice aceite de palma con certificado de sostenibilidad.

En Auchan, que engloba las enseñas Alcampo y Simply, ya trabajan con sus proveedores «con el objetivo final de eliminar el aceite de palma» de sus marcas propias, aunque por el momento no tienen una fecha concreta para conseguirlo.

En Lidl también señalaron que intentan evitarlo «siempre que se puede», pero en los casos donde no es factible «se utiliza el que tiene sello de sostenibilidad».

Fuentes del grupo Carrefour explicaron que han optado por exigir el uso de aceite de palma sostenible a sus proveedores, mientras que desde El Corte Inglés han recordado que la empresa forma parte de un grupo de trabajo sobre este ingrediente en el marco del Consumer Goods Forum con el propósito de que todo el aceite de palma utilizado cuente con un certificado ecológico.

La preocupación de las grandes cadenas por este ingrediente se hace público meses después de que la empresa SuperSano, con una red de 12 establecimientos en España y especializada en producto ecológico, decidiera retirarlo totalmente de sus lineales. La cadena ha visto cómo sus ventas se incrementaban hasta en un 20% después de tomar la decisión de renunciar a los productos elaborados con aceite de palma. Fuentes del sector de la industria explicaron a Efeagro que el aceite de palma es un ingrediente vegetal utilizado normalmente junto a otros aceites que «en muchos casos no se puede sustituir». «Aporta consistencia, untuosidad, da un toque crujiente… También alarga la vida útil del producto y evita que se deteriore visualmente. Se ha intentado sustituir, pero no se ha podido», señalaron estas mismas fuentes.

El aceite de palma es utilizado habitualmente tanto por la industria alimentaria como por la cosmética. Su uso está permitido internacionalmente, aunque la OMS aconseja limitar su consumo por contener cerca de un 50% de ácidos grasos saturados. Su producción se concentra en países tropicales, sobre todo Malasia e Indonesia.