EL ORGANO ABANDONADO, metido en un bote de plástico, apareció el miércoles en un paseo del casco antiguo de Barcelona. Los municipales verificaron el hallazgo y trasladaron el órgano al Instituto Anatómico Forense para su examen. Los médicos deberán practicar un análisis morfológico y celular del tejido, así como la prueba del ADN, para saber si pertenece a una persona o fue adquirido en una parada de despojos de un mercado municipal.