Un equipo de investigadores ha descubierto en Estados Unidos fósiles de peces extremadamente bien conservados que murieron hace 66 millones de años, en el momento del impacto de un meteorito responsable de la extinción del 75% de la vida en la Tierra. Y tal vez la de los dinosaurios.

Estos fósiles de peces y otros animales ancestrales se encontraron en Dakota del Norte, a 3.000 kilómetros del cráter de Chicxulub, lugar donde impactó con el asteroide.

Este estudio, que se publicará el lunes en la revista científica 'Proceedings of the National Academy of Sciences', muestra cómo el asteroide tuvo un impacto devastador en grandes áreas, destaca en Eurekalert su autor principal, Robert de Palma.

"Es como un museo del Cretácico tardío", dice Mark Richards, uno de los autores y profesor emérito de la Universidad Berkley de California.

OLAS GIGANTES

Los choques causados ​​por el impacto del asteroide causaron olas gigantes en un mar interior de lo que hoy es Dakota del Norte, que, al alcanzar un río cercano que alberga peces, invirtió la corriente.

Torrentes de piedras y escombros cayeron sobre ellos, antes de que una segunda ola viniera a enterrarlos. Luego se fosilizaron con el tiempo.

"Una maraña de peces de agua dulce, vertebrados terrestres, árboles (...) y otras criaturas marinas se ha compactado en esta capa", explica Robert dePalma.

Antes de morir los peces inhalaron fragmentos propulsados ​​por el impacto del asteroide, señalan los investigadores, que encontraron piezas en sus branquias.

La biodiversidad descubierta en el sitio es notable. "Al menos varios especímenes son especies nuevas, y otros son los mejores ejemplos de su tipo", dijo De Palma.

"Estamos viendo una grabación momento por momento de uno de los eventos más importantes en la historia de la Tierra, y ningún otro sitio tiene un registro como ese".