Un hombre sobre el que pesaba una orden de alejamiento mató presuntamente ayer a su mujer con un arma blanca y después se suicidó en la localidad de Vilalba (Lugo). La pareja, que no tenía hijos en común, estaba en trámites de divorcio y ya no residía junta.

La mujer fue hallada muerta a las 12.45 horas con heridas de arma blanca en el cuello en el garaje donde también apareció ahorcado su expareja, en lo que todo hace suponer que se trata de un nuevo crimen machista si bien la investigación por parte de la Guardia Civil ha sido declarada secreta para tratar de esclarecer los hechos. El hombre, de 50 años, residía desde hace poco tiempo en la aldea de Nete, en el término municipal de Vilalba, y se encontraba en paradero desconocido desde el sábado, cuando un familiar suyo presentó denuncia en la Guardia Civil alertando de su desaparición ya que no había acudido a su puesto de trabajo.

Según indicaron fuentes de la investigación, los forenses están elaborando un informe para certificar las causas exactas del fallecimientos de ambos. El Ayuntamiento de Vilalba decretó tres días de luto por este suceso que ha conmocionado a los vecinos de esta población de la comarca de la Terra Chá lucense.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, condenó el «machismo criminal» que ha dejado este domingo «otra víctima» en la localidad de Vilalba. En su cuenta de Twitter, Sánchez envió su cariño a la familia y amistades de la víctima y ha recordado que la violencia machista «no cesa». «Tenemos que acabar cuanto antes con esta lacra. Debemos hacerlo juntos y juntas y debemos hacerlo ya», concluyó el mensaje que escribió Sánchez en su mensaje de la red social.

El Gobierno gallego expresó su «más enérgica condena» y manifiesta su «consternación» ante el asesinato ocurrido ayer, además de hacer un llamamiento en un comunicado «a toda la sociedad para que se rebele contra esta repudiable lacra». Recuerda la Xunta de Galicia que las víctimas tienen a su disposición el teléfono 016, un número gratuito y confidencial.