El secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE) y obispo auxiliar de Valladolid, Luis Argüello, reivindicó ayer el derecho de la Iglesia a seleccionar a candidatos a sacerdotes «enteramente varones y por tanto, heterosexuales». «Nosotros en nuestra comprensión del ministerio admitimos a diáconos permanentes que sean hombres casados pero en el presbiterado como en el episcopado pedimos varones célibes y dentro de esta configuración de varones célibes pedimos también que se reconozcan y sean enteramente varones y por tanto heterosexuales», precisó Argüello. Visto el revuelo de sus palabras, el secretario general de los obispos españoles rectificó sus palabras sobre sacerdocio y heterosexualidad y se disculpó por si la expresión que utilizó molestó a algunas personas. «No he querido decir que los homosexuales no sean perfectamente varones», indicó. Y pidió disculpas: «Yo no quiero decir que los varones homosexales no sean perfectamente varones, lo que yo he querido expresar con esta frase poco afortunada era algo más amplio», señaló en un audio enviado por la Conferencia Episcopal Española (CEE), tras la rueda de prensa. «He tratado de explicar por qué la Iglesia elige a estas personas que reúnan esta triple condición: varones --sexo varón, género varón--, que por supuesto las personas de condición hommosexual así lo son», subrayó.

Si bien reconoció que «al saltar» su declaración a «un titular de prensa, sobre todo, si se dice de manera negativa --los homosexuales no son enteramente varones--», consideró oportuno rectificar porque «no es» lo que quiso decir.

La desafortunada afirmación fue pronunciada al ser preguntado por cómo va a conjugar la Iglesia Católica la prohibición de los seminarios de admitir a personas homosexuales con las leyes autonómicas contra la LGTBfobia.

En relación a estas leyes, el portavoz de los obispos ha reclamado el derecho de la Iglesia católica a hacer una propuesta antropológica y pidió que un sentimiento no se eleve a «categoría jurídica» para pedir un cambio de sexo.

«Se ha elevado a categoría jurídica un sentimiento a la hora de cambiar de sexo y de ir al Registro y decir ahora yo no me llamo Antonio sino Mari Pili o Antonia», añadió.

REACCIÓN

La portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, evitó ayer pronunciarse sobre las declaraciones del nuevo secretario general de la Conferencia Episcopal (CEE), Luis Argüello, que defendió que los candidatos al sacerdocio deben ser «enteramente varones, por lo tanto heterosexuales». Preguntada por las palabras de Luis Argüello, que acaba de ser elegido secretario general de la CEE en sustitución de José María Gil Tamayo, la también ministra de Educación opinó, que estas declaraciones «hablan por si mismas».