El titular del Juzgado de Instrucción número 1 de L'Hospitalet, que instruye el caso de la menor marroquí residente en l'Hospitalet que estuvo secuestrada en Bolivia, ha citado como imputados a los padres de la pequeña, que este lunes por la mañana ha llegado al aeropuerto de El Prat. El juez les atribuye un delito de abandono de familia.

La niña, de 10 años, fue liberada hace dos semanas en Bolivia tras permanecer secuestrada siete meses. En el aeropuerto del Prat le esperaban sus padres, acompañados de varios mossos d’Esquadra de la unidad central de secuestros. La pequeña aterrizó de madrugada en Barajas, tras un largo viaje con los dos oficiales de la Guardia Civil que se trasladaron hace un mes a Bolivia a seguir de cerca las investigaciones sobre su localización y rescate.

El regreso de la niña se ha retrasado debido a su situación en España, donde como el resto de familiares carece de papeles. Para agilizar su vuelta, finalmente se le tramitó un salvoconducto de urgencia que le ha permitido entrar finalmente en España.

El juez ha pedido a la Generalitat informes sobre la conveniencia de que la pequeña vuelva o no con su familia. La menor ha podido reunirse con su familia en el aeropuerto, ante los que se ha mostrado contenta. A continuación, la pequeña ha sido trasladada al hospital de Sant Joan de Deu, donde está siendo examinada por los médicos. La pequeña presentaba buena cara.

El juez ha ordenado que, con carácter provisional, la niña quede ingresada en un centro de la Direcció General de Protecció a la Infància (DGAIA) hasta que reciba los informes y pueda tomar una decisión. Mientras tanto, podrá ver a su familia pero en un entorno "controlado".

Madre del secuestrador a prisión

La menor fue puesta en libertad el pasado día 8, tras permanecer casi siete meses en poder de un ciudadano boliviano de 35 años que se la llevo a Bolivia con el permiso de sus padres. El hombre está ingresado en la prisión de El Abra, en Cochabamba, y la Fiscalía de Bolivia le ha imputado los delitos de trata de personas, asociación delictiva y abuso sexual. También está en prisión la madre del secuestrador que ayudó a su hijo a esconder a la niña las primeras semanas y que no quiso colaborar con las autoridades bolivianas cuando el hombre se adentró con la menor en la selva.

Operación en Bolivia

En la operación de rescate, de gran complejidad al tratarse de una zona de difícil acceso, participaron de forma coordinada las fuerzas especiales contra el crimen organizado de Bolivia y dos guardias civiles que se trasladaron al país andino, con la participación de los Mossos d’Esquadra, y con el respaldo de la Embajada de España en La Paz.

El presunto captor era vecino de rellano de los padres de la niña, que dieron su permiso para que la menor le acompañara a unas vacaciones al país andino. La pequeña llegó a Bolivia en agosto del año pasado y dos semanas después la familia había perdido el contacto con ella. Entonces denunció su desaparición ante los Mossos de'Esquadra.