Un indigente encontró ayer sábado el cadáver de un bebé en un contenedor de basura, situado en el número 89 de la calle Laguna en el madrileño distrito de Carabanchel, según fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid. A las 12.20 horas del sábado, un hombre que estaba rebuscando en un contenedor de basura se percató de que dentro de una bolsa de plástico había un bebé fallecido, que tenía el cordón umbilical sin pinzar y todavía restos de placenta.

Alertó a la Policía y a los sanitarios del Servicio de Asistencia Municipal de Urgencia y Rescate Samur-Protección Civil, que confirmaron el fallecimiento y constataron que era un bebé a término. Los médicos, no obstante, no pudieron determinar cuánto tiempo llevaba fallecido. Este y otros datos los ofrecerá la autopsia a la que se someterá al cuerpo y que desvelará si el niño nació vivo.

El hombre fue atendido por una psicóloga del Samur-Protección Civil debido a que presentaba un cuadro de ansiedad, tal y como indicó a Efe una portavoz de Emergencias Madrid. Al lugar se desplazaron agentes de la Policía Judicial, la Policía Científica y una Comisión Judicial para investigar los hechos. Por su parte, agentes de Homicidios comenzaron a investigar para descubrir quién es la madre.

GRAVE EN MURCIA / Por otro lado, dos hombres y una mujer fueron detenidos por la Policía Nacional en Murcia acusados de herir de gravedad a una bebé de 10 meses a la que cuidaban, que se encuentra ingresada en el hospital con lesiones producidas por el llamado síndrome del zarandeo.

La pequeña tenía fracturas antiguas y nuevas en los huesos del codo, radio y tibia, producidas por un adulto como consecuencia de «sacudidas violentas y peligrosas, de forma repetida». La investigación se inició a raíz de que la madre de la niña la llevara al pediatra a una revisión rutinaria de la enfermedad neurológica que padece, y el médico le informara de la existencia de fracturas óseas.