Un camión con 17.500 kilos de hachís fue interceptado el viernes por la Guardia Civil cuando desembarcaba en el puerto de Algeciras (Cádiz) procedente de Tánger (Marruecos). La droga estaba camuflada entre cajas de tomates. Según fuentes de la investigación, los agentes ya esperaban la llegada de un alijo dentro de un vehículo de la flotilla de una empresa de transportes marroquí.

En el dispositivo participó la unidad canina especializada en estupefacientes. La mercancía fue localizada por uno de los perros escondida dentro de unos palés que estaban encajonados detrás de los contenedores de tomates.

Esta operación es la segunda más importante en tráfico rodado que se realiza en el puerto de Algeciras, tras la aprehensión de 25 toneladas de hachís el pasado junio. La droga iba en un camión frigorífico cargado de pescado.