Un joven detenido por la policía el pasado martes ha confesado ser el autor de la muerte de una chica hallada calcinada en un descampado de Reus a primeros de julio. Enrique A. C., de 23 años, que pasó ayer a disposición judicial, declaró haber matado a su amiga Tais, de 25 años, tras una discusión el día 3 de julio. Ambos habían ido juntos a un descampado del barrio Sant Josep Obrer de Reus, muy próximo a la carretera C-14, frecuentado por prostitutas y toxicómanos, porque eran drogodependientes.

La víctima, según la policía, también se prostituía ocasionalmente para costearse la droga. Según la declaración del detenido, aquella noche discutieron y le propinó un golpe tan contundente en la sien que la chica murió. El huyó en su propio coche y regresó dos días después con salfumán que había comprado en un supermercado, roció el cuerpo y le prendió fuego.

El cadáver de la joven fue hallado el pasado 7 de julio por unos vecinos oculto entre unos matojos de un descampado situado detrás de la Facultad de Económicas de Reus.

El cuerpo presentaba tal grado de carbonización que la policía tuvo dificultades para reconocer el sexo y la edad, pero aparentemente no mostraba signos externos de violencia, lo que llevó a los investigadores a pensar que la la víctima había muerto estrangulada. La joven, a la que le faltaban algunas piezas de ropa, tenía la cara totalmente quemada.

Sin embargo, la autopsia determinó que se trataba de una mujer joven, de complexión delgada, que había recibido un fuerte golpe en la sien. Al parecer, la víctima se había distanciado de sus familiares y no mantenía contacto con ellos. Fue una amiga suya con quien compartía piso quien denunció la desaparición a la policía. El Grupo de Investigación de la Comisaría Local de Reus, con la colaboración del Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior y Policía Científica de Barcelona, investigó el entorno de la víctima. Se da la circunstancia de que tres años atrás, muy cerca del mismo descampado, un vecino que paseaba el perro halló el cadáver de una prostituta de 50 años. El caso sigue abierto.