Los abusos sexuales en la escuela religiosa Valdeluz Agustinos de Madrid parecen confirmarse. El titular del Juzgado de Instrucción número 13 de Madrid, Hermenegildo Barrera Aguirre, ha ordenado el ingreso en prisión provisional con cargos del profesor Andrés Díez. Pesa sobre él la acusación de abusos sexuales, algo todavía más escandaloso por su condición de exsacerdote y ser el profesor de Música, Filosofía y Etica.

En la ínforme policial recibido por el juez se establece que Díez usaba las clases particulares, en las que se quedaba a solas con las chicas, para acosarlas sexualmente. La Policía sospecha que podría llevar abusando de menores desde el año 2006. En la declaración ante el juez, el profesor se ha mostrado muy frío y poco colaborador en su declaración. La policía sospecha que elegía a sus víctimas entre niñas de 11 a 17 años, aunque la mayoría de ellas tenían de 11 a 13 años.

Larga declaración

El magistrado ha adoptado la decisión de encarcelar al profesor católico después de tomarle declaración durante tres horas y media --desde las 11:00 hasta las 14:30 horas--. El juez le atribuye siete delitos de abusos sexuales y ha eliminado las acusaciones por un delito de violación y otro de exhibicionismo.

Durante su declaración ante el juez, el profesor ha negado los hechos y ha defendido su inocencia, según su abogado, Ramón Muñoz Cid, quien ha anunciado que recurrirá el auto de prisión.

Curas destituidos

También ha acudido a los juzgados el abogado del director del colegio, Eustaquio Iglesias, y del jefe de estudios del colegio Valdeluz, Juan José De Cossío, detenidos y puestos en libertad por la Policía por conocer supuestamente los abusos y no denunciarlos. Quedaron libres con la obligación de comparecer ante el juez cuando sean requeridos. Ambos, que son curas en activo, han puesto sus cargos a disposición del centro y el Consejo Provincial de los Agustinos ha aceptado su renuncia por la gravedad de los hechos.

Estrategia de la defensa

La defensa intenta eludir la imputación del detenido y los dos posibles acusados al considerar que los hechos han prescrito. La Policía arrestó inicialmente al director del colegio y al jefe de estudios por el presunto delito de omisión del deber de perseguir delitos.

La consejera madrileña de Educación, Lucía Figar, había exigido al centro concertado Valdeluz que apartara "inmediatamente" de sus cargos al director y al jefe de Estudios, que "pudieron tener conocimiento de los abusos sin actuar" con prontitud.