La empresa estadounidense Bloomberg ha demostrado que el exprimidor inteligente creado por la compañía Juicero, con sede enSilicon Valley (San Francisco), es "una estafa". El artilugio, creado por Doug Evans y que él mismo comparó con el iMac de Steve Jobs, supuestamente permite a los usuarios transformar paquetes de frutas y verduras troceadas en zumos. Bloomberg, que invirtió en la exprimidora de Juicero, ha revelado a través de un vídeo que una persona puede estrujar las bolsas más rápido que la máquina y, además, sacarles más jugo.

Juicero ha reaccionado en menos de 24 horas a este vídeo ofreciendo a los clientes que compraron el producto la oportunidad de devolverlo y reembolsarles en un plazo de un mes los casi 400 euros que ahora cuesta, unos 300 menos que hace unos meses. Lo que provocó el descenso de la facturación. A pesar de todo, el cuestionado 'gadget' lleva recaudados más de 120 millones de dólares.

Algunos inversores se han irritado porque la máquina es más grande de lo que Evans les propuso y, además, se han dado cuenta de que es un objeto innecesario. Por este motivo, Evans fue sustituido en octubre por Jeff Dunn, el ex presidente de CocaCola.

INFORMACIÓN INNECESARIA

Evans ha promocionado su invento como un "estrujafrutas" que se conecta a Internet, capaz de leer el código QR de los paquetes para avisar al usuario si estos han caducado y con su propia 'app' móvil. Los críticos consideran innecesaria todas estas prestaciones y aplicaciones porque la fecha de caducidad puede consultarse en el envase del producto.

Además, las bolsas se compran de forma individual, lo que supone a los clientes un coste de entre cuatro y ocho dólares por bolsacada vez que quieren consumir estas bebidas que la compañía califica de "refescantes y saludables". Esta estrategia de la compañía recuerda "al de otras empresas que combinan la venta de una pieza de 'hardware' y que obliga a repetir las compras de consumibles”, según declara un inversor de Bloomberg. Nespresso es un ejemplo.