Johannes Winandus, el conductor holandés de 51 años que el 27 de junio provocó un accidente mortal en la N-340 en Cambrils (Tarragona), en el que murieron dos hermanas de Reus, de 25 y 19 años, y resultó herida una amiga de las fallecidas, de 24, fue juzgado ayer en Reus.

Winandus admitió haber bebido seis cervezas por la noche, antes del siniestro. Recuerda que sufrió un ataque de tos y un mareo con anterioridad al choque.

Su abogado sostuvo que tiene problemas coronarios y ha sido operado dos veces del corazón, "lo que le puede causar desvanecimientos". Pidió la absolución o, alternativamente, un año de cárcel. Fiscal y acusación particular solicitaron cuatro años de cárcel y la retirada del carnet durante seis. FERRAN GERHARD