Pocos sucesos en España, en los últimos años, han generado tanto rechazo y conmoción como el caso de La manada. Tras conocerse ayer la decisión de dejar a sus cinco miembros en libertad provisional bajo fianza se organizaron rápidamente manifestaciones de repulsa para la misma tarde en diferentes ciudades del país. Por ejemplo, Pamplona, Barcelona, las tres capitales vascas (Bilbao, San Sebastián y Vitoria) o algunas gallegas (La Coruña, Santiago y Orense), aunque hubo muchas más. El Gobierno y los partidos políticos se han sumado a las protestas de los colectivos feministas. Fuentes del Ejecutivo recordaron que «los hechos probados, por los que han sido condenados los miembros de La manada, son gravísimos».

El grito de «no es abuso, es violación» volvió a escucharse en la plaza Consistorial de Pamplona. «Somos mujeres: no vamos a parar» se leía en la pancarta de grandes dimensiones que fue desplegada. Y junto a ella, los asistentes exhibieron otra con el lema «No es abuso, es agresión, nosotras te creemos», mientras coreaban consignas como «esta justicia es una mierda», «no es no, lo demás es violación», «macho violador, al triturador», «hermana, yo sí te creo» o «basta ya de justicia patriarcal». Representantes del Gobierno de Navarra y del Ayuntamiento de Pamplona y políticos de diferentes partidos se sumaron a la protesta convocada a través de las redes sociales por el movimiento feminista.

«Interpretamos esta decisión como una burla a todas las mujeres, que ningunea nuestra fuerza y nos insulta como movimiento, refleja que la seguridad de las mujeres no es una prioridad para el sistema judicial y que la desproporcionalidad de la justicia se ceba especialmente con nosotras», leyó una representante feminista el comunicado. El alcalde de Pamplona, Joseba Asirón, calificó la decisión de «una gravedad extrema».

No estaba previsto, pero la protesta finalizó con una cadena humana rodeando la Audiencia Provincial de Navarra.

En la protesta en Barcelona, el colectivo feminista reclamó «autodefensa feminista» ante la «injusticia patriarcal» y denunció que «hay que cambiar esta justicia que no defiende nunca los intereses de las mujeres». Algunas de las manifestantes exhibieron carteles con lemas como «¿La manada en libertad? ¡Inmoral!» y «Nos queremos libres». Además, corearon eslóganes como «Basta de impunidad para los violadores» y «No es justicia, es abuso». En la protesta participaron concejalas y consejeras catalanas.

Las convocatorias de protestas se han disparado para hoy, y ya se han anunciado movilizaciones en Madrid, Valencia, Granada, Málaga, Sevilla y Vigo, entre otras muchas.