A pesar de que la llegada de inmigrantes en patera a las costas del sur de España acapara la mayor parte de la atención, el grueso de la inmigración no entra al país por mar, sino que lo hace por carretera a través del paso fronterizo de La Junquera (Gerona) o en avión por los aeropuertos de Barajas y de El Prat. El año pasado fueron expulsados 92.000 inmigrantes indocumentados en las fronteras con Francia, Portugal y Marruecos. De éstos, 40.446 se devolvieron desde La Junquera.

Este número crece año tras año. Desde el 1 de enero hasta el pasado 31 de julio, los agentes del Cuerpo Nacional de Policía en La Junquera expulsó hacia Francia a un total de 35.399 inmigrantes indocumentados, mientras que durante el mismo periodo en el 2003, se retornaron 21.258 personas, según las estadísticas policiales.

La mayoría de estos inmigrantes entraron en el espacio comunitario a través de las fronteras de Austria tras pagar a redes mafiosas o particulares que utilizan autocares y furgonetas. "Son auténticas líneas regulares de la inmigración clandestina", reconoce un portavoz policial.

DINERO Y RESERVA FALSA El método que utilizan estas redes es sencillo: facilitan a cada pasajero una reserva falsa de hotel y unos 500 euros o dólares para acreditar en las aduanas austriacas que entran a Europa para hacer turismo. Cuando cruzan esta primera frontera, el conductor vuelve a quedarse con el dinero.

Esto provoca que, cuando llegan a La Junquera, no llevan suficientes euros para justificar el viaje. Además, los agentes se percatan de que la reserva de hotel es falsa y les devuelven a Francia, en aplicación del acuerdo de readmisión incluido en el Tratado de Schengen.

El número de extranjeros que intentan cruzar la frontera de La Junquera y que son expulsados ha crecido espectacularmente en los últimos años. En el 2001, se retornaron hacia Francia 3.500 inmigrantes, mientras que un año más tarde fueron 28.500 personas, y en el 2003, las patrullas móviles interceptaron a 40.446 extranjeros.

En el 2002, debido a la futura ampliación de la UE, la comisión suprimió los visados en Rumanía y Bulgaria. Esto explica que la mayor parte de los inmigrantes expulsados en La Junquera procedan de estos países. Durante el primer semestre de este año se han interceptado 24.509 ciudadanos rumanos y 7.374 búlgaros.

MAS AGENTES Ante este alud de inmigrantes en situación ilegal, el Ministerio del Interior ha anunciado que doblará el número de agentes en el paso fronterizo de La Junquera. Está previsto que en las próximas semanas se incorporen a la plantilla 25 agentes y que, a largo plazo, otros 40 se trasladen a este punto. "El personal actual es justo para tanto trabajo y ampliar la plantilla era una reivindicación histórica", explica el comisario provincial accidental de Gerona, Josep Joan Ferragut.