LOS AFICIONADOS aprovecharon la pasada noche y la anterior para contemplar Júpiter desde una perspectiva poco habitual, alineado con la Tierra y el Sol, una oposición que sólo se produce cada 11 meses. Con un telescopio fue posible observar detalles de gran belleza, como la famosa mancha roja, aunque el planeta es visible estos días a simple vista.