Aunque para algunos padres es aún un misterio, entre los adolescentes Musical.ly está arrasando. ¿Por qué engancha tanto? Por una combinación ganadora: la posibilidad de poner las canciones de moda para bailarlas durante el vídeo con la sencillez a la hora de editarlo. Un funcionamiento básico y a la vez entretenido. ria de la aplicación. A estas alturas, son pocos los adolescentes que desconocen su existencia, pero ¿cómo la descubrieron? Muchos coinciden que fue gracias a Instagram. «A mediados del año pasado, vi que todo el mundo empezaba a subir vídeos bailando y haciendo play-back en Instagram y tuve curiosidad», cuenta Paula Dueñas, que añade que lo que le llamó la atención fue que no conocía «ninguna red social así, es muy original».

Los jóvenes están de acuerdo en que la aplicación es divertida y fácil de usar. Además, el hecho de poder ir visitando perfiles hace que se suelan pasar más de media hora usándola. «Para hacer un vídeo tardo poco, apenas unos minutos. Pero cuando me pongo a ver los de otra gente puedo estar más de media hora», confiesa Nihad Elanjafi.

Pero solo con Musical.ly no les basta. Para conseguir más difusión, la mayoría se aprovecha de Instagram. Andrea Dueñas cuenta: «Con la aplicación no tengo suficiente. Entro en Instagram para ver más. Hay cuentas que suben solo vídeos de Musical.ly y así consigo ideas para los míos».

Con el tiempo se verá si Musical.ly continúa creciendo y se convierte en una gran red social como Instagram, o se queda en una moda pasajera.

Lo que está claro es que ahora la aplicación causa furor entre los jóvenes, que pueden sentirse Justin Bieber o Ariana Grande durante 15 segundos, y cada vez son más los que la tienen en sus smartphones.